PARA QUE LO DISFRUTES

Tres triunfos que devuelven la fe y la alegría al Puerto del Callao. Nueve puntazos que hacen del equipo un fiel reflejo de la resistencia, del no morir, de luchar hasta el final. Boys ganó y no ganó bien. Boys ganó jugando feo, pero en la guerra y en el fútbol, la forma no importa, lo que importa es conseguir lo que se propone.

Si bien, no se dio una demostración de buen fútbol, se vio a un equipo -ahora sí- comprometido con salvar la categoría. Más allá de los errores, que son muchos, el
desempeño de los rosados puso en claro que para vencerlos tendrán que tener más corazón que ellos y de seguro, morir en el intento.

Delantero mexicano se quedó con las ganas de anotar

Guevara no estuvo tan fino como en otras ocasiones, pero su calidad fue fundamental para abrir el marcador, luego de un gran pase de Albarracín. A poco del final, se conseguiría el segundo gol, que a la larga aseguró el partido, aunque costó la expulsión de Rossel, por supuestamente agredir verbalmente al arquero rival.

En su descargo, el delantero rosado afirmó que el portero visitante lo estuvo escupiendo todo el partido, y que el árbitro no hizo nada, además que ni celebró el gol “Yo nunca habló de los árbitros pero esta vez dejó mucho que desear. Me ha estado escupiendo todo el partido (Rodríguez), no sé por qué, yo no tengo problemas con nadie. Metí el gol y ni siquiera celebré, me quede callado y me botó, no entiendo mi expulsión”, aseguró el delantero.

Rossel y arquero visitante se dijeron de todo

Asimismo, expresó que un jugador extranjero tiene que tener respeto por el país que le da la oportunidad de jugar “A él nadie lo conoce y siempre tiene problemas de este tipo con otros jugadores, tiene que estar agradecido porque acá le damos de comer. Él es un extranjero y tiene que respetar. ¿Me va a esperar dice? Ya pues, normal que salga, aquí lo espero”, manifestó de forma desafiante.

Por su parte, el estratega rosado se fue satisfecho con lo mostrado por sus dirigidos y por los tres triunfos al hilo que tiene el equipo, por ello expresó que es todo un suceso para el Callao que esto le haya pasado al Boys “Nosotros trabajamos para cada partido. Lo que pasa es que acá es un suceso ganar tres partidos seguidos. Parece que fuera el cumpleaños de cada uno de nosotros”, dijo el técnico porteño.

El maltrato a los hinchas, algo de nunca acabar

La alegría que significa ver ganar al Boys se ve reflejado en las tribunas. En comparación al partido con Vallejo, para éste asistió más gente, evidenciando el interés que existe por parte de los hinchas, cuando al equipo le va bien.

La nota lamentable la pusieron los encargados de la organización del partido, quién tan solo habilitaron dos boleterías para que los hinchas compren sus entradas, originando un caos terrible. Esto hizo que muchos se regresarán a sus casas, o en el peor de los casos, les compren entradas a los revendedores. Un jalón de orejas para los directivos del club, que tienen que poner mayor compromiso en sus acciones. Después se quejan cuando no va gente al estadio.

Bastante trabajo le espera al entrenador en las próximas semanas

Volviendo al fútbol y al futuro del equipo, la diferencia con los que pelean abajo, se ha puesto de candela. Los resultados fueron insólitos éste fin de semana. Gálvez ganó de visita y sacó ventaja, Cienciano se tumbó al Aurich y salió de zona de descenso. Esto ha hecho que la distancia del penúltimo con Boys quede a ocho puntos, por lo tanto -a pesar de las victorias conseguidas- aun no están completamente salvados.

El fixture que le espera al Boys es realmente complicado. El miércoles -1.15 pm- enfrentará de visita al León de Huánuco, el fin de semana recibirá al Aurich en el Callao y luego chocará con Cienciano, en Cusco, en un partido donde se jugará más de tres puntos y el cual puede ser fundamental para las aspiraciones de Boys, de asegurar, de una vez, su permanencia en la máxima división.

Hincha rosado con una peculiar forma de alentar

Sin duda, son partidos durísimos, en que la altura, los viajes y el desgaste podrían pasar factura. Miguel Company y su cuerpo técnico tienen harto trabajo por hacer. Hay que preparar a los jugadores, en lo mental, físico y deportivo, para que puedan soportar todo el trajín de unos partidos que serán vitales.

Que la alegría siga en el Callao, que los hinchas no paren de festejar, y que el idilio que une al Boys con su gente no se termine jamás. Juntos podremos conseguir el objetivo y estaremos ahí para disfrutarlo. VAMOS BOYS CARAJO.